lunes, 13 de diciembre de 2010

"Tron Legacy": Walt Disney podría tropezar dos veces con la misma piedra

El hombre ya no es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. Al parecer, también les pasa a algunos roedores, pues la Compañía del Ratón  (tal y como se refieren los medios especializados americanos a Walt Disney) podría  estrellarse de nuevo con la secuela de Tron, que fue uno de sus grandes fracasos de los 80.

Ojalá me equivoque porque no está el negocio del cine como para muchos fiascos, pero Disney ha apostado muy fuerte por la segunda taza de esta historia virtual que se adelantó a su tiempo, hasta el punto de que para que resulte rentable tienen que ir a verla los jubilados, las amas de casa, y en general todos los sectores del público, como Avatar. El único "problemilla" es que no funciona tan bien como la cinta de James Cameron...

Acudí con muchas esperanzas a uno de los primeros pases de Tron Legacy. Confieso que saludé a todo el que me encontré con aquello de "¿Qué pasa, Tron?", y aunque el chiste es demasiado facilón, que levante la mano el que no sucumba a la tentación cuando vaya a ver la película.

Pero los personajes son muy poco humanos y más sosos que un yogur de agua desnatado. Se lleva la palma el gran Jeff Bridges, que ni parece inmutarse cuando se reencuentra con su hijo al que lleva sin ver más de veinte años, y que muchas secuencias después le dice que probablemente los abuelos habrán muerto (como si le importara tres narices). Parece que a su personaje le han lobotomizado. En resumen, que personalmente me pareció un poco "tos-tron-azo".

Mi sensación es que funcionará más o menos bien por inercia, pues han hecho tanta publicidad que gran parte del público no se la quiere perder. ¡Han ido suministrando un tráiler por año para ir creando ambiente! Pienso que los primeros que vayan a verla pese a la acción y a los vistosos efectos especiales no saldrán tirando cohetes, por lo que no sé yo si se alcanzarán las cifras de recaudación deseadas... muy justita va a ir la cosa. A saber, pues que a mí no me guste no quiere decir nada, pues arrasa Harry Potter y las reliquias de la muerte (1ª parte), y eso que me aburrió muchísimo.

Por pura curiosidad, decidí ponerme en DVD Tron, la película original. Salvo el final -una sobredosis de efectos digitales que hoy parecen más desfasados que la Arielita- lo cierto es que se ve con interés, y tiene golpes muy divertidos como ese bit que sólo tiene contestaciones positivas y negativas y que ninguno entendimos en los 80 qué narices era hasta algún tiempo después, cuando se popularizaron los ordenadores domésticos. Los personajes rebosan humanidad, como ese programa de seguros, Ram, que defiende a capa y espada que se puede comprar un futuro estupendo con unas cuotas realmente asequibles.

Hace tres años, hubo que retirar los DVD originales de Tron por orden del Departamento de Seguridad Nacional. ¡El film se rodó en parte en la instalación de investigación nuclear Shiva, y se temía que contuviera información Top Secret!

En fin, a ver qué tal funciona la secuela en las taquillas. Por cierto, la contestación más friqui que me dieron a lo de "¿Qué pasa, Tron?" fue "no, no soy Tron, yo soy un programador". Diez puntos en "friquismo".

2 comentarios:

  1. vaya pena pues... aún así sí tú ni siquiera disfrutaste con la primera y eso de meterte en un videojuego de los de nuestra época es que tuviste una infancia muy dura, oh némesis del futuro... ;-)

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  2. Sí, a mí la primera me gustó en su época y además, la acabo de volver a ver, y me ha gustado muchísimo más que la segunda, dónde va a parar.

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