Falleció el verano de 2010.
D.E.P.
Los apasionados del género fantástico y del buen cine ruegan una oración por su alma.
Mis peores temores se confirman. Tras ver el tráiler de Airbender: El último guerrero, me temía lo peor. La nueva cinta del director de El sexto sentido no me interesaba gran cosa a priori. Y eso que a mí me han apasionado películas suyas (El bosque, Señales) denostadas por la mayor parte de la crítica y siempre seré defensor del realizador, pero esto me daba mala espina...
Ahora, nada más volver de vacaciones, mi primera tarea ha consistido en ir a ver la cinta. ¡Menudo comienzo más malo! Espero que no sea un presagio de lo que nos espera esta temporada.
Al entrar en la sala de proyección, descubrí que había cuerpos exánimes de críticos con telarañas, que posiblemente se habían quedado olvidados de alguna sesión anterior.
El principal problema del film es que es muy aburrido, la historia nunca resulta interesante, los personajes son arquetipos de buenos y malos, hablan con frases de tebeo barato y las secuencias de acción en cámara lenta a lo Matrix son bastante sosas e interminables.
¿Se imaginan que a Woody Allen le hubieran caído críticas espantosas y al final hubiera renunciado a su estilo y se dedicara a rodar westerns y películas de kárate de Jean-Claude Van Damme? Es lo que le ha ocurrido en cierta medida a M. Night Shyamalan. Tanto le han puesto a bajar de un burro, sobre todo los críticos yanquis, incluso cuando rodaba películas tan interesantes como El protegido, que posiblemente Shyamalan ha decidido rodar un film completamente diferente a ver qué tal.
El resultado es que ahora sigue recibiendo críticas tan malas, o peores que antes. Pero esta vez con razón. Y también le criticamos sus incondicionales.
En fin, no todo está perdido. Ha fichado para su siguiente trabajo entre otros a Bruce Willis, lo que presagia un film más personal de los suyos... Ojalá podamos anunciar pronto que Shyamalan ha regresado de entre los muertos.
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